martes, 28 de junio de 2016

All-in o nada.

Resulta aburrido seguir hablando de esto. Aburrido para el lector. Aburrido para mí. Llevamos un año dándole vueltas al asunto y no termina de arreglarse. Ni el cambio del coach de pitcheo, ni la llegada de un nuevo general manager, ni los 217 millones de dólares por Price han solucionado absolutamente nada. La rotación de los Red Sox sigue siendo un desastre.

Después de tres meses de competición nos encontramos con que Boston únicamente cuenta con tres abridores "fijos". El propio Price, que a pesar de llegar con vitola de estrella está firmando su peor temporada como profesional. Un Porcello cumplidor que está haciendo lo que se esperaba de él y que a día de hoy parece un número tres de lo más fiable. Y por último nos encontramos con Steven Wright, una de las sensaciones de la temporada. El nudillero empezó como número cinco provisional de la rotación por la lesión de Eduardo Rodriguez y ha acabado sonando como abridor para el All-Star Game.

Las dos últimas posiciones de la rotación están siendo una auténtica pesadilla. Buchholz, Rodriguez, Kelly, Owens, O'Sullivan y Elias son los seis pitchers que las han ocupado con actuaciones que se han movido entre lo lamentable y lo patético. Tan desafortunados han estado estos lanzadores que durante buena parte de junio los Red Sox se la jugaron con una rotación de solo cuatro brazos.

Estadísticas del pitcheo abridor de los Red Sox en 2016. Fuente: Fangraphs.

El problema no ha sido solo de los pitchers, desde el banquillo y la gerencia se han cometido una serie de decisiones horribles que no han ayudado para nada. ¿Cómo es posible que nadie del staff técnico se diera cuanta de una serie de cambios en la manera de lanzar de Price que probablemente estaban lastrando su rendimiento? Tuvo que ser Pedroia, después de ver varios videos, el que le recomendara a su compañero recuperar su antigua mecánica con la consiguiente mejora. Por no hablar de lo mal que se ha llevado la vuelta del Rodriguez al equipo. Ante lo espantoso que estaba siendo Buchholz se decidió acelerar el regreso del venezolano a pesar de que estaba teniendo problemas en sus aperturas en las Menores. El resultado era de esperar y de sobra conocido por todos. Quizás ahora Rodriguez ya este recuperado físicamente, pero tiene un bloqueo mental del que le va a ser difícil salir.

Con este panorama y con algún otro problema, aunque mucho menor, en el bullpen y en la profundidad del banquillo se plantan los Red Sox en julio. Parece evidente que habrá algún trade. La cuestión es que Boston no necesita pulir un poquito aquí y abrillantar una pizca allá. No basta con un brazo que de profundidad a la rotación, se necesitan dos, incluso tres, abridores de garantías. Incluso habría que pensar en reforzar el cuerpo de relevistas y añadir una o dos piezas secundarias, pero solventes, a la ofensiva.

Dombrowski, GM de la franquicia de Massachusetts desde el otoño pasado, es de los que no tienen problemas a la hora de destrozar granjas para atraer a jugadores consagrados. Ahora es el momento. Pero si se mueve que no sea para traer un número dos o tres a la rotación, que sea para forzar la llegada de dos brazos que de verdad hagan temblar a toda la Liga. No tiene sentido perder algo de talento joven para que un Shoemaker o un Pomeranz te den algo de oxígeno. Aprovecha todos los recursos que uno de los mejores farm system del béisbol te ofrece. Deshazte de Benintendi, Devers, Espinoza, Kopech, Light y hasta de Moncada si con ello vas a poder conseguir a gente como Fernandez, Gray, Teheran o Carlos Gonzalez.

La temporada de los Red Sox es ahora mismo una bola elevada que vuela hacia los jardines. Si queremos que sea un cuadrangular las oficinas deben apostar fuerte y moverse bien. Poner toda la carne en el asador y traer refuerzos serios que de verdad le den al equipo el salto de calidad que necesita. No valen medias tintas. Para fichar a un jugador de rol lo mejor es no moverse y terminar la temporada como se pueda. "Hazlo o no lo hagas", le decía Yoda a Luke, "pero no lo intentes". Dombrowski debe ir a puerta gayola y lanzarse un órdago, un all-in y lo que haga falta, pero dejarse de faroles.


2 comentarios:

  1. Básicamente de acuerdo en casi todo, excepto en lo de traer a Teheran
    Sería más de lo normal mismo. Mediocridades

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    1. Algo de razón tienes. Si me apuras hasta lo de Gray sería un error. Está demostrando que aún no tiene la regularidad que los Red Sox necesitan a día de hoy. Teheran al menos está firmando una buena campaña y se podría confiar en que sus números se mantendrían en el equipo al que fuera traspasado, aunque es una operación que como bien dices tendría riesgos. Lo cierto que si los Red Sox quieren hacer algo necesitan lanzadores establecidos y cuya regularidad este ya probada. Más allá de Fernandez no creo que haya mucho en el mercado que verdaderamente suponga impacto inmediato. A ver como se da la cosa. Saludos

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